Cuando se es dueño de un negocio hay que saber que las cosas no son tan fácil como la gente cree. Existen muchas tareas que hay que hacer y que son problemas de todo tipo. Hablamos de las clásicas facturas, pagar proveedores, acreedores, empleados, productos y demás cosas, de lo que es responsable el dueño del negocio. Esto hace que se muchas veces se pasen muchos nervios.
Además, para esta clase de personas no hay días libres o vacaciones, o en el caso de que haya, no son gran cosa. Los negocios siempre van a ser lo primero, y hay que estar alerta para todo lo que pueda llegar a suceder, o que afecte a nuestra empresa.
En el paso concreto nuestro, tenemos un pequeño negocio del sector del calzado en la población en la que vivimos. Cada semana se hacen pedidos nuevos, se hacen facturas, pago a proveedores y se venden la totalidad de productos que se hacen. No es algo sencillo
En ocasiones va todo bien en el negocio, pero hay otras en las que las ventajas bajan y la economía no es todo lo boyante que debiera.
Aún todavía me acuerdo de algunos donde las cosas fueran realmente mal. Aunque uno siempre opta por ofertar la mejor calidad a un precio bueno, las ventas seguían bajando. Con ello, los días iban pasando y comenzamos a darnos cuenta que era prácticamente imposible la liquidación del stock que se tenía. No sabíamos que hacer y la ansiedad o la angustia parecía que tomaban el control de la situación.
Las soluciones a veces están en Internet
El caso es que se encendió la bombilla e Internet tenía la solución, puesto que me puse a investigar la forma en la que podía ser posible que alguien desease el stock que teníamos de calzado y que eran nuevas y de buena calidad. Apareció en San Google www.liquistocks.com, una empresa que se dedica a adquirir lotes de productos para su posterior comercialización.
Solo tuve que completar el formulario existente y en un breve periodo de tiempo me supieron responder. No tardamos en llegar a un acuerdo y así puede dar esa salud que quería a toda la cantidad de calzado que no veíamos la forma de deshacernos de ello.
Eso marcó un antes y un después, pues siempre que algo nos sobra lo que hacemos es contactar con Liquistocks para ver si tienen interés en adquirir lo que no se vende.
Como nuestros productos son nuevos y de buena calidad, lo cierto es que no siempre llegamos a venderlos a ellos, pero sí que es cierto que nos da esa seguridad tan necesaria en el negocio pues sabes que es una puerta que se abre si las cosas van mal y podamos necesitar de sus servicios.
El control del stock es importante
Los trabajos para la gestión del inventario son fundamentales, más en una empresa de este tipo, Para ello hay que saber qué volumen de inventario es con el que contamos. De no ser así, es posible que contemos con un exceso de productos en las estanterías o que falten estos productos, lo que podía ser realmente aún peor.
Sí que es cierto es que ciertas fuentes consultadas hacen que no sea imposible el que se pueda hacer un control del propio inventario de la empresa. Aquí las soluciones van a consistir en que se solicite la ayuda de los proveedores, contando con el personal, el cual se tiene que encargar del inventario, sabiendo el tiempo que va a precisar cada producto en cuestión para que se pueda vender, estableciendo una serie de niveles paras monitoreo.
Pensemos que el control de inventario es lo que se dice toda una ciencia. En esta ciencia vamos a englobar la aún más complicada disciplina de administrar y dirigir una empresa.
Como ya decíamos al comienzo, no es sencilla la gestión de un negocio en el que van a depender los ingresos de una serie de personas. Por todo ello hay que valorar dicha tarea y entender a todos los que la han hecho posible.
Esperemos que después de todo lo que os hemos comentado tengáis claro que la liquidación de stock es realmente un punto importante en el que hay que trabajar y siempre no dejarlo de lado.
Las empresas siempre atraviesan por dificultades, antes o después, pero todo es más fácil si contamos con el necesario control de todo lo que hace falta para poder contar con todo atado y bien atado para poder estar preparado antes las dificultades que puedan presentarse.